PRESENTACIÓN
El fundamento axiológico de la Institución Educativa San Mateo se fundamenta en la calidad humana de los actores que integran la comunidad educativa. Su devenir diario y cotidiano se dirige a la práctica de valores como la autoestima, el respeto por los demás, las buenas relaciones de amor, paz y convivencia como también el interés por la búsqueda de un ser integral en todas sus dimensiones.
El instrumento por excelencia para viabilizar dichos propósitos es precisamente el Manual de Convivencia. Este, a su vez debe ser el fruto de una concertación de principios, valores y normas que permitan un clima de convivencia tranquilo y armónico para el desarrollo de las diferentes actividades de la institución.
Por exigencia legal expresa, los planteles educativos tienen a su disposición un mecanismo apropiado para regular y evaluar la conducta escolar de los estudiantes, mediante el señalamiento, en forma autónoma, de los derechos, deberes y obligaciones de los mismos en relación con los demás estudiantes, los educadores y los directivos; las faltas disciplinarias y de conducta, las sanciones respectivas, los órganos competentes para imponer estas, y el procedimiento aplicable en todo lo cual tales establecimientos deben acatar los mandatos, prohibiciones y límites contemplados en el ordenamiento jurídico, en especial en las normas constitucionales que consagran los derechos fundamentales de las personas.
Cabe entonces concluir, que los derechos fundamentales pueden ser regulados y canalizados en sus diversas expresiones, pero nunca desconocidos ni desnaturalizados.
El presente Manual de Convivencia, ha sido el fruto de acuerdos, mesas de trabajo, concertaciones y difusión de los principales elementos de convivencia como también la conformación de las diferentes instancias que hagan posible su evaluación y aplicación, siempre teniendo como referente la normatividad vigente y sobre todo las sentencias emanadas de la Honorable Corte Constitucional.
El instrumento por excelencia para viabilizar dichos propósitos es precisamente el Manual de Convivencia. Este, a su vez debe ser el fruto de una concertación de principios, valores y normas que permitan un clima de convivencia tranquilo y armónico para el desarrollo de las diferentes actividades de la institución.
Por exigencia legal expresa, los planteles educativos tienen a su disposición un mecanismo apropiado para regular y evaluar la conducta escolar de los estudiantes, mediante el señalamiento, en forma autónoma, de los derechos, deberes y obligaciones de los mismos en relación con los demás estudiantes, los educadores y los directivos; las faltas disciplinarias y de conducta, las sanciones respectivas, los órganos competentes para imponer estas, y el procedimiento aplicable en todo lo cual tales establecimientos deben acatar los mandatos, prohibiciones y límites contemplados en el ordenamiento jurídico, en especial en las normas constitucionales que consagran los derechos fundamentales de las personas.
Cabe entonces concluir, que los derechos fundamentales pueden ser regulados y canalizados en sus diversas expresiones, pero nunca desconocidos ni desnaturalizados.
El presente Manual de Convivencia, ha sido el fruto de acuerdos, mesas de trabajo, concertaciones y difusión de los principales elementos de convivencia como también la conformación de las diferentes instancias que hagan posible su evaluación y aplicación, siempre teniendo como referente la normatividad vigente y sobre todo las sentencias emanadas de la Honorable Corte Constitucional.